Buenos días, me acabo de levantar, y sólo sé que nos vamos hoy de Vietnam. Ha sido todo muy intenso, mucho tiempo, tengo muchas ganas de abrazar a mi hija Amanda. Aquí me he dado cuenta de cuánto se puede amar, para desear un hijo, y dejar otro un tiempo para poder recogerlo; y cuánto se puede necesitar a un hijo. Hoy tengo la necesidad de estar con mi hija Amanda, creo que hoy he llegado al límite, no puedo más.Tengo a mi mujer y a mi hija Daniella conmigo, pero a ti te necesito cariño, aquí conmigo.
En fin, que hoy es el día, ya nos vamos. En tan sólo 1 día podré abrazar a mis tres amores a la vez. Entonces va a ser cuando de verdad sea completamente feliz.
Me gustaría deciros que me siento a la vez el padre más orgulloso del mundo de tener la hija que tengo, mi primera hija, es un gran orgullo tener una hija que ha comprendido perfectamente, dentro de la cabeza de una niña de 5 años (y medio), que sus papás han tenido que marcharse a por su otra hermana, y para eso ella ha tenido que renunciar a nosotros durante 20 días. 20 días en la vida de una niña, es mucho tiempo.
Por eso hoy que termina ésta aventura, la siento a ella mucho más adentro que nunca, hoy le reconozco ese mérito y ese esfuerzo, de la gran persona que se está haciendo.
Mucha gente nos lo dice, y tienen razón, QUE GRAN SUERTE QUE HEMOS TENIDO DE TENERTE ¡¡¡
Y a mi mujer, qué decirle, que muchísimas gracias por aguantarme, y que objetivo cumplido. Dentro de poco en casa.
Hoy no hay fotos, la foto de verdad, la buena, la pondré cuando estemos los cuatro.
Un beso a todos, y nos vemos en España.